La caída del cabello es un problema común en el mundo de hoy. Se estima que más del 50 por ciento de las personas sufrirán pérdida de cabello en algún momento. No debe pasar desapercibido que el estrés también se ha vinculado a la calvicie. Así que, si te preguntas, “¿por qué se me cae el cabello por estrés?” ¡Adelante! Vamos a ver algunas de las causas del resultado.
¿Qué es el estrés?
El estrés es una reacción natural del cuerpo ante situaciones de peligro o amenaza percibida. A veces se le conoce como la respuesta “luchar o huir”. Normalmente, el estrés es temporal y, a corto plazo, no es malo. Ayuda al cuerpo a estar alerta y a manejar situaciones estresantes.
Sin embargo, cuando el estrés se vuelve crónico o dura mucho tiempo, pueden surgir problemas de salud significativos. Estos pueden incluir cosas como fatiga, dolor de cabeza, insomnio, trastornos de la memoria y tos crónica. Algunas de estas afecciones, como la caída de cabello, pueden ser un problema cosmético.
¿Puede el estrés causar pérdida de cabello?
No se ha confirmado que el estrés sea una de las principales causas de la pérdida de cabello. Sin embargo, hay evidencias de que el estrés y una mala salud emocional pueden aumentar el riesgo de experimentar quedarse calvo. En algunos casos, la alopecia areata (un tipo de calvicie en parches) puede verse agravada o desencadenada por el estrés.
Un estudio de 2007 en el _Annals of Dermatology_ encontró que los pacientes con alopecia areata presentaban niveles más altos de ansiedad y depresión. Los autores del estudio afirmaron que estas emociones podrían tener un efecto sobre el sistema inmunológico, lo que tal vez contribuyera a la pérdida de cabello.
Otras causas de la calvicie
Antes de asumir que el estrés es la causa de la pérdida de cabello, es importante descartar otras posibles explicaciones. Algunas de las causas más comunes de calvicie abarcan:
Genética: La principal causa de la mayoría de los tipos de calvicie es la predisposición genética. Si hay un historial familiar de calvicie, es probable que un individuo desarrolle la afección también.
Trastornos de la tiroides: El hipotiroidismo (una afección en la que la glándula tiroides no produce suficientes hormonas) se ha vinculado con la caída del pelo.
Embarazo o parto: Después del embarazo o del parto, es común experimentar la pérdida temporal de cabello. Esto podría deberse a cambios hormonales.
Medicamentos: Algunas veces, ciertos medicamentos pueden tener como efecto secundarios la pérdida de cabello. Estos incluyen los medicamentos anticonceptivos orales de baja dosis, los antidepresivos y los medicamentos para el acné.
¿Cómo tratar la calvicie inducida por estrés?
Si sospechas que el estrés es la causa de tu caída de cabello, es importante reducirlo. Una de las formas más efectivas de combatir el estrés es a través del ejercicio regulado, la meditación y la relajación. El yoga y la relajación muscular progresiva, cuando se practican a diario, pueden ayudar a reducir el estrés.
Además de reducir el estrés, también hay tratamientos tópicos y medicamentos que pueden ayudar a aumentar el crecimiento del cabello. Estos tratamientos no solo detendrán o ralentizarán la caída del pelo, también podrían producir nuevo crecimiento.
Los tratamientos tópicos más comunes para la calvicie incluyen el uso de lociones y champús con minoxidil. Estos productos se han demostrado eficaces para estimular el crecimiento del cabello cuando se usan regularmente.
Los medicamentos orales, como el finasteride, también pueden mejorar el crecimiento del cabello en algunas personas. Estos medicamentos bloquean la producción de la enzima que contribuye a la calvicie. No se deben tomar durante el embarazo ni por mujeres en edad fértil, ya que se ha demostrado que pueden causar defectos de nacimiento en los bebés.
Resumen
En conclusión, la pérdida de cabello se ha asociado con el estrés. Si crees que el estrés está contribuyendo a la caída de tu cabello, es importante reducir el estrés para prevenir la pérdida adicional de cabello. Además, hay tratamientos tópicos y medicamentos que pueden ayudar a estimular el crecimiento del pelo.
Además, es importante descartar otras posibles causas de la calvicie, como la predisposición genética, los trastornos de la tiroides y los medicamentos. Si experimentas mucha pérdida de cabello o tienes preocupaciones, hablar con un médico puede ser útil.